- Es su forma de “revolución” para exigir más presupuestos para la educación superior.
Pese a la polémica nacional y crítica a jóvenes universitarios que salen a protestar encapuchados, los estudiantes de la Unimagdalena rompieron el paradigma. Se taparon la cara y gritaron “Somos estudiantes decentes, pero nos declaramos en rebeldía”.
La acción obedece a las numerosas críticas que han recibido los universitarios a nivel nacional y aseguraron que, no son vándalos ni delincuentes.
“Esta es una manera de decirle al Gobierno que somos estudiantes y no delincuentes. Lo que queremos son más recursos económicos y no el recorte que hizo el presidente Iván Duque”, manifestó David Llanos, asistente de la protesta.