Padres de familia del colegio Elvia Vizcaíno De Todaro, ubicado en Aracataca, Magdalena, denunciaron este miércoles, 6 de diciembre, un caso de presunto abuso de autoridad por parte de la rectora del colegio hacia los alumnos y el personal docente de la institución.
Afirman que “la rectora ha instalado unas rejas que restringen la entrada de los estudiantes al área de la rectoría y otras oficinas”.
De acuerdo con la denuncia de los padres, la rectora mantiene a los estudiantes prácticamente confinados dentro del colegio. Una de las denunciantes mencionó: “hubo una fuga de gas en la institución hace unos días, y los alumnos estaban encerrados, exponiéndose al riesgo de inhalar el gas; por suerte, fueron rescatados”.
Asimismo, agregó que “si los estudiantes necesitan algo, como medicamentos o comunicarse con la rectora, no pueden hacerlo debido a una reja que se los impide”, enfatizó para el medio citado.
De acuerdo con los tutores y padres de familia, los menores son confinados en salones bajo llave y la reja que separa el colegio de Rectoría también tiene cadenas y un candado de
Otra madre que compartió la denuncia en La FM expresó: “más del 80 % de la población estudiantil no conoce a la rectora. Ella es muy distante con los alumnos, y para los grados que se realizaron hace unos días, no organizó una ceremonia digna; incluso nos dijo a los padres de familia que nos correspondía organizar la ceremonia de grados”.
El medio radial, al parecer, logró comunicarse con Nurys Caballero, la rectora de la institución educativa, quien rechazó las acusaciones de los padres y aseguró que “los estudiantes no quedan encerrados”. “La barrera existe, pero es amplia y fue instalada por cuestiones de seguridad”, indicó la primera en el cargo de la institución.
“En caso de emergencia, es fácil retirar el cerrojo; incluso un niño de primaria podría abrir esas barreras”, aseguró para el medio. A pesar de estas declaraciones, desmintiendo las denuncias, son más los reclamos de los padres de familia y profesores sobre supuestos malos tratos.
La emisora también entrevistó a una docente, quien afirmó: “es comprensible que ella se defienda y niegue todo, pero las denuncias son verídicas. La presión no solo recae sobre los alumnos, sino también sobre nosotros, los docentes. De hecho, varios profesores han enfermado debido al estrés laboral que se vive en la institución desde que ella asumió como rectora”.
Estas personas, de acuerdo con el medio citado, aseguran que prefieren mantener el anonimato en sus denuncias por temor a perder sus empleos.
