Con un total de 150 familias damnificadas por las crecientes súbitas de los ríos Sevilla y Frío esperan la ayuda del Gobierno Nacional en el municipio de Zona Bananera, según lo informado por el coordinador de la Oficina de Gestión del Riesgo de Desastres de la Alcaldía Municipal, Joaquín Castillo.
El reporte del funcionario municipal se dio después de emprender un recorrido de inspección sobre las zonas afectadas por cuenta de las torrenciales lluvias que se han venido presentando desde el fin de semana en la parte alta de la Sierra Nevada de Santa Marta, lo que ha generado el desbordamiento de ambos afluentes y las respectivas inundaciones en los corregimientos de Sevilla, Río Frío y Guacamayal.
“Son alrededor de 150 familias afectadas. Las inundaciones se registraron en cuatro o cinco barrios del corregimiento de Sevilla y varias de sus veredas. Se trata de la primera lluvia que se ha presentado con mucha intensidad en el 2023 y ya ocasionó daños. Por ahora estamos evaluando con los organismos de socorro los daños y analizando las necesidades de la población para determinar o no la calamidad pública y gestionar una contratación más acelerada”, informó el coordinador de Gestión del Riesgo.
Castillo también expresó que están tratando de tomar las medidas preventivas para mitigar el impacto de estas emergencias en situaciones similares, por lo que esperan que el Gobierno Nacional de viabilidad financiera para la ejecución de tres proyectos radicados por la Alcaldía de Zona Bananera.
“La solución definitiva a esta problemática es que la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo apruebe los tres proyectos que tiene radicado el municipio en cabeza de nuestro alcalde, Efraín Ortega, que de hecho en estos momentos se encuentra en Bogotá luchando para que estos proyectos le den la viabilidad financiera. Son proyectos que presentó el municipio hace más de dos años y estamos esperando su aprobación para construir geocontenedores, que minimicen el impacto de las inundaciones”, precisó el coordinador.
Igualmente, Castillo anunció que se contratarán maquinarias amarillas para darle más ampliación al caudal y hacer unos jarillones que “de alguna forma no son una solución de fondo, pero sí minimizan el impacto. Sin embargo, no tenemos la capacidad financiera para ejecutar el proyecto de los geocontenedores y por eso es que lo hemos llevado a Bogotá, al igual que hemos solicitado recursos a los gobiernos Nacional y Departamental”.
