La alta presencia de habitantes de calle en el Centro Histórico de Santa Marta, enciende las alarmas entre turistas y comerciantes y residentes de la zona. El incremento de esta población genera una alta incidencia en la percepción de inseguridad. En hechos denunciados recientemente hay una vinculación directa de esa población que ha venido ocupando de manera vertiginosa parques, plazas y callejones.
Según la Corporación Centro Histórico, dirigida por Diana Giraldo, parece ser un tema que se le salió de las manos al distrito, por lo que la tardanza en la aplicación de una política pública ha conllevado a que los indigentes pernocten en corredores de restaurantes, bares, hoteles y casas de familia. El gremio cataloga este fenómeno como un problema de salud pública.
“Con la Alcaldía hemos tenido diferentes mesas de trabajo, y le hemos reiterado que es urgente buscar alternativas para enfrentar estos casos. Una de las grandes situaciones que se presentan, y que debe ser analizada igualmente, es que muchos de ellos son de nacionalidad venezolana, que fueron habitantes de calle en Venezuela y ahora vienen con esa misma práctica en Santa Marta. En la Corporación lideramos un censo en diferentes puntos y concluimos que, en el sector, hasta el mes de octubre, albergaba a 322 habitantes de calle, y sé que esto ha subido muchísimo. De esta cifra, 226 son de nacionalidad venezolana”, declaró Giraldo.
En esta línea, lo que les llena más de incertidumbre y preocupación a la entidad sin ánimo de lucro, es que en esta coyuntura se están involucrado niños y mujeres, que por lo mismo que viene sucediendo en el Centro, han quedado en estado de embarazo. A su vez, también hay presencia de adultos mayores y adolescente, construyendo un sector bastante convulsionado, que se suma a las diferentes deficiencias que todos conocen.
