Este lunes, el río amaneció con una altura de 9,38 metros, manteniendo en alerta a los banqueños, especialmente a quienes se dedican a la pesca, ya que son los principales perjudicados al tener que abstenerse a realizar sus faenas pesqueras.
Ante esta situación y el recrudecimiento de la ola invernal durante el mes de noviembre, los organismos de socorro se encuentran atentos ante cualquier emergencia ambiental que pueda registrarse. A la fecha, en El Banco han resultado más de 6 mil familias damnificadas.
Por su parte, desde la administración municipal se están adelantando acciones para reducir los riesgos de enfermedades a causa del invierno, especialmente con adultos mayores y niños.
Entrega de medicamentos, visitas diarias a los albergues, entrega de agua potable a las familias damnificadas, inspección constante a las instituciones educativas y jornadas de recolección de basuras, son algunas de las iniciativas de las autoridades para hacerle frente a la situación actual del pueblo, en materia de salubridad.
