Los procedimientos fueron en los barrios La Nevada, Tamacá Tayrona, Santa Cruz, La Bolivariana, Andrea Carolina, El Parque, Boulevard de La 19 y en el Conjunto Residencial Villas de Andalucía.
Labores de seguimiento e inteligencia desarrolladas por personal de la Policía Metropolitana de Santa Marta y la Fiscalía 38 de Estructura de Apoyo EDA, en coordinación con la empresa Air-e, logró desmantelar una banda delincuencial que se dedicaba a la manipulación ilegal de redes eléctricas en diferentes sectores de la ciudad.
Las investigaciones apuntan a que, Carrillo, de profesión Ingeniero Electrónico tenía un ‘laboratorio’ propio en el barrio Tamacá en Santa Marta, en donde supuestamente manipulaba medidores de energía y al parecer su objetivo era poner un dispositivo electrónico a los medidores para que a través de un control remoto el usuario de Air-e pudiera encenderlo o apagarlo para impedir el registro de los kilovatios-hora reales consumidos en los predios, con el fin de defraudar la energía.
Entre tanto según las autoridades, Vera, Acosta e Ibarra, sería los encargados de desmontar los medidores en Santa Marta y Barranquilla para manipularlos.
Dijo la empresa afectada que, el cabecilla de la banda era José Eduardo Maldonado, hijo de un funcionario pensionado de la antigua empresa Electricaribe, al parecer se encargaba de buscar los ‘clientes potenciales’ para ofrecerles la manipulación de los medidores.
Se supo que, durante la investigación se habría demostrado la complicidad de Ruiz y Polo, quienes trabajaban en la empresa contratista LECTA en labores de lectura, y De Luque, quien trabajó para la contratista DELTEC. Estos tres sindicados tenían perfilados a los clientes para ofrecerle.
