Ante el llamado de la comunidad, especialmente de quienes habitan en la Subregión Sur y Río, tras las afectaciones causadas en las vías terciarias por la segunda temporada de lluvias que golpea al Magdalena, la Gobernación dispuso de maquinaria amarilla con el fin de mitigar el impacto y mejorar la comunicación terrestre.
Con preocupación, los magdalenenses observan que las constantes precipitaciones imposibilitan el tránsito vehicular desde las zonas rurales y veredales hasta las cabeceras municipales.
Una de las vías a intervenir es la que comunica a Pivijay con el corregimiento Las Canoas. Sin embargo, por las actuales condiciones en las que se encuentra, se acordó, en conjunto con la comunidad y los distintos grupos cívicos, un cronograma de trabajo especial para atender las emergencias y otro para la temporada seca.
