“Queremos trabajar, queremos solución”, gritan los empleados de la cadena de almacenes, cerrados por los operativos en una investigación por supuesto lavado de activos.
Los operativos contra estos almacenes se dieron en varias ciudades del país.
Se estima que son unos 3.000 trabajadores los que quedan en la calle por la ocupación de esos establecimientos.
Se han conocido de cierres en Barranquilla, Montería, Valledupar, Santa Marta y Ciénaga, entre otros.