La inclusión es el camino para construir. La Universidad del Magdalena realizó el Lanzamiento oficial del Comité de Inclusión e Interculturalidad luego de varios encuentros entre socializaciones y elecciones de representantes de los diferentes grupos poblacionales y diversos que hacen parte de la Alma Mater.
La masiva participación de los estudiantes, docentes y demás miembros de esta Casa de Estudios Superiores permitieron presentar oficialmente a la comunidad académica y en general qué es el comité, el contexto del marco normativo y lo que establece la Resolución Rectoral 671 de 2021 por el cual fue creado.
En cumplimiento con el Eje 4 del Plan de Desarrollo UNIMAGDALENA COMPROMETIDA 2020-2030, el Rector Pablo Vera Salazar PhD, presidió e instaló el Comité de Inclusión e Interculturalidad conformado por directivos y estudiantes pertenecientes a diferentes grupos poblacionales como madres cabeza de hogar, personas con discapacidad, personas con orientación sexual diversa LGBTIQ+, personas víctimas de la violencia y desplazamiento forzado, indígenas y otros grupos étnicos como gitanos, raizales, afrodescendientes.
Dicho comité tiene como objetivo principal direccionar, concertar y articular procesos de inclusión en todos los escenarios educativos, culturales, de liderazgo y de política institucional para los grupos poblacionales diversos, promoviendo y garantizando el derecho a la educación, igualdad y participación activa en las diferentes prácticas institucionales.
La apuesta de la Institución siempre ha estado dirigida a la inclusión y la diversidad cultural. Este es el camino de una ruta que se viene realizando desde hace más de cuatro años y que inició con la materialización del sueño de ser una universidad que transforma vidas y hoy se reafirma bajo las políticas, actas rectorales y actividades que integran a estos grupos de protección especial y minorías.
“Es muy valioso contar con estos mecanismos de trabajo que la Universidad está implementando porque estamos sintiendo que somos más incluyentes dentro de nuestra Alma Mater. Sentimos que tenemos un apoyo por parte de los diferentes estamentos de la Universidad y poder no solo avanzar en nuestra carrera profesional sino también suplir ese rol que tenemos como madres cabeza de hogar” manifestó Damaris Villar Navarro, estudiante de noveno semestre del Programa de Derecho y Representante Estudiantil de las Madres cabeza de hogar y desplazados o víctimas del conflicto armado.
Las emociones y reiterados agradecimientos estuvieron a flor de piel, justamente por los protagonistas que hacen parte de este comité, todos enfocados hacia la labor del Doctor Vera Salazar, como fiel promotor de estos escenarios de diversidad, además de su incansable gestión y por priorizar las necesidades de la razón de ser del campus universitario como lo son los estudiantes.
Las sonrisas son simplemente la cosecha que finalmente puede recogerse con este primer paso, en donde no será necesario recurrir a instancias mayores para que más que aprender conocimientos, se reconozca una nueva forma de aprender y enseñar. Las expectativas, siempre serán mayores, para multiplicar la participación de los seres humanos quienes también hacen parte fundamental de esta sociedad y del futuro del país.
“Me quedo corto de palabras al decir que estoy completamente agradecido porque es gracias a este momento que mi comunidad puede ser más visible, puede ser más tenida en cuenta, más abrazada por la comunidad y la Universidad, y es preciso gracias a esta carta rectoral que emitió el Doctor Pablo Vera que nos dio la oportunidad de socializar y mezclarnos entre todos, uno de los lemas que tenemos entre nosotros: no hay sexo, ni género, ni identidad, hay seres humanos” recalcó con gran emoción Santiago San Juan Mercado, estudiante de segundo semestre del Programa de Enfermería y Representante Estudiantil de la comunidad LGTBIQ+.
Finalmente, uno a uno los miembros fueron plasmando sus firmas en el acta que representa no solo el inicio de una universidad intercultural y diversa, sino que también representa la transformación de vidas y sociedad como lo anotó el Máximo Directivo: “esta universidad no tiene gran presupuesto económico, pero tiene gran presupuesto humano y cultural porque la multidiversidad que encierra este campus es de los pocos que puede tener cualquier universidad del mundo”.
Así mismo, enfatizó: “quienes están, los representantes estudiantiles del comité en un futuro sean quienes estén aquí y cuando estemos celebrando nuestros primeros 100 años en el 2042, tal vez recuerden que hoy tenemos un modelo educativo de universidad intercultural, incluyente y diversa que seamos referencia para el mundo y que se puede comparar con los mejores del mundo, no por los resultados en materia de investigación sino por los resultados en materia de transformación de vidas y de sociedad que es lo que finalmente tiene que hacer la educación”.
