Cuatro militares fueron asesinados por integrantes del Clan del Golfo en la vereda Santa Lucía.
Ante el asesinato de 4 militares en el Norte de Antioquia , organizaciones sociales y la iglesia insisten en que la arremetida de los grupos armados ilegales estaba advertida sobre todo por el retiro de policías del antiguo espacio territorial en Ituango.
Piden mayor seguridad para las comunidades rurales que están desprotegidas.
Según Óscar Yesid Zapata, vocero de la ONG Proceso Social de Garantías, ha habido alertas tempranas y otros llamados a la fuerza pública y al Gobierno por el alto riesgo de los campesinos por los hostigamientos de grupos como el ELN , las disidencias de las Farc o Clan del Golfo, este último que es el responsable de la emboscada que dejó los cuatro militares muertos.
“Sentimos que hay una responsabilidad por omisión del gobierno, de la Gobernación de Antioquia y el Gobierno Nacional y de todo el estado en su conjunto, porque el escenario como tal ya estaba advertido y no se le está brindando ni las garantías de seguridad a las comunidades ni se está buscando realmente someter a los grupos como tal”, afirmó Zapata.
Uno de los llamados constantes lo ha hecho el padre Yonai Tuberquia, sacerdote de la vereda Santa Lucía, Ituango , quien advirtió que las comunidades se sienten muy desprotegidas desde que se retiró un grupo de policías que cuidaba el espacio territorial de las Farc.
“Ahí teníamos permanentemente la presencia de la policía y hace quince días el estado decidió sacarlos de ahí dejándolos solos porque sabemos que el ejército hace presencia pero está permanentemente en el caserío”, complementó Tuberquia.
El religioso, que también tiene un liderazgo social en Ituango, pidió a las autoridades que se establezca al menos una base militar en la vereda Santa Lucía, pues es un punto estratégico de los grupos ilegales pues es la entrada al Nudo Paramillo con los límites entre Córdoba, el Bajo Cauca y el Urabá.
