Por Hernando Fernández de Castro
Cuando escribo estas letras, acabo de recibir la noticia que mi madre, que es una anciana de 96 años, no se encuentra bien, que no quiere comer y que parece que ya se aburrió de vivir, se que esta es la ley de la vida, pero las madres son mujeres abnegadas, tan diligentes con sus hijos, que nos cuidan desde la concepción, la gestación, les duele mucho parirnos y sin embrago, su amor nos lo manifiestan en el instante mismo en que nacemos, por eso no queremos que se nos mueran nunca, así sepamos que esa es la ley de la vida.
Nuestro egoísmo de hijos e hijas, no nos permite aceptar su partida, pero sabemos que esta es inexorable, no se si cuando esto se publique el domingo día de las madres, todavía Meme, mi madre estará con nosotros, por eso, le quiero rendir tributo a ella y a las madres de Ciénaga, Santa Marta, el Magdalena y de todo Colombia.
La madre es, mujer y como mujer es novia, esposa, madre, abuela y en todos sus roles, sin importar los dolores, los miedos o los malos ratos o los buenos, ustedes mujeres y madres, siempre están ahí, siempre tienen algo que decirnos y animarnos en los buenos y en los malos momentos, nunca nos ven defectos, siempre somos sus hijo, a quienes cuidan y adoran por siempre, sin importar si son buenos o malos hijos, porque las madres siempre son buenas.
La madre es el refugio del niño, cuando nos amamantan callan nuestro llanto, más tarde no enseñan a caminar a decir mamá y papá y así siempre nos están enseñando las cosas de la vida, nunca dejamos de ser sus niños, sus hijos por los cuales siente amor y se desvelan hasta que Dios las llama a su lado.
Colombia, está viviendo días amargos, la protesta y los bloqueos se han impuesto como método de manifestar el inconformismo los jóvenes, los trabajadores y todos aquellos que no se siente bien dentro de nuestra comunidad, ya son varias las victimas que nos ha dejado este inconformismo y seguramente, son muchas las madres que han llorado a sus hijos, sean jóvenes, trabajadores o miembros de la policía, todos son hijos de colombianas que no merecen sufrir la pérdida de sus hijos por ideología políticas.
En honor a nuestras madres, por favor hagan un alto en el vandalismo y tratemos de resolver nuestras diferencias civilizadamente, recordemos que nuestras madres, seguramente nos esperan en casa y que por nada del mundo les gustaría esperarnos en el cielo tan pronto.
Un homenaje y un reconocimiento a todas las madres del mundo, especialmente a las que han tenido la paciencia de leer estas líneas que me salen del corazón, con pesar pensando que muy seguramente el próximo día de las madres no tendré a la mía, pero agradecido con Dios por permitirnos tenerla hasta ahora y hasta cuando el disponga.
Un abrazote para todas las madres.
