Por Carlos Andrés Salas
La Universidad del Magdalena es una institución educativa de alta calidad, acreditada por el Ministerio de Educación Nacional, que causa orgullo no sólo a los magdalenenses, sino a toda la Región Caribe colombiana. El acceso a la educación superior ha traído consigo la mejora de las condiciones de vida de muchas familias y ha incrementado el desarrollo de la ciudad de Santa Marta y del Departamento del Magdalena. Desde su fundación en 1958 la Universidad ha contado con diferentes tipos de administración, unas más favorables que otras, logrando erigirse como un centro de estudios superiores, cimentado sobre la autonomía académica, administrativa, financiera y presupuestal, con gobierno, renta y patrimonio propio e independiente.
Se avecina la elección de Rector en la Universidad del Magdalena y la posibilidad de un cambio en la administración de ésta, da comienzo a una guerra indiscriminada por parte de algunos para apropiarse de ella. En la contienda se enfrentan el actual Rector de la Universidad, el doctor Pablo Vera Salazar y el exsecretario de planeación de la Alcaldía Distrital de Santa Marta, el doctor Francisco García Rentería. En el fondo es Vera vs Caicedo. Pero no solo se disputa el futuro de la Unimag, sino el futuro político de Santa Marta y el Departamento del Magdalena.
Una de las administraciones más sobresalientes que ha tenido la Universidad ha sido la del doctor Carlos Caicedo Omar. A él se le reconoce y agradece la recuperación del alma máter de la peor crisis en que se ha visto inmersa. Sin embargo, la excelencia de la cual hoy goza esta institución se debe al doctor Pablo Vera Salazar: nacido en esta tierra, Ingeniero Civil, Especialista y Magister en Administración y Doctor en Ciencias de la Dirección, se ha ganado a pulso su reconocimiento.
Hace tan solo unos días a la Universidad le fue otorgada una acreditación internacional por su Facultad de Ciencias Empresariales y Económicas. Ésta se suma a un sinnúmero de otras acreditaciones y los reconocimientos que ha obtenido por su área de investigación. Entre las grandes gestiones que debe resaltarse al actual rector, se destaca la recuperación del Bloque Mar Caribe, una obra que se había convertido en todo un elefante blanco, cuyo origen se remonta al período de la rectoría de Ruthber Escorcia (alfil del Caicedismo). Todos recuerdan los inconvenientes ocasionados por la tardanza en la culminación de ese bloque, que no fue posible, hasta la llegada del doctor Pablo Vera.
El Bloque Mar Caribe es una hermosa e impresionante edificación que cuenta con dos bloques, de cuatro pisos, cada uno con 43 salones, con capacidad para 2.400 estudiantes, 36 aulas convencionales para 1.600 estudiantes, dos auditorios con aforo cada uno para 200 asistentes, siete salones tipo torreón, destinados para clases magistrales o especializadas. ¡Tiene de todo! Sorprende más aún que el costo haya sido de 24 mil millones de pesos, esto es muchos menos de lo que ha costado la aun inconclusa Megabiblioteca (27 mil millones). ¡Válgame Dios!
Tanto los estudiantes como la comunidad en general reconocen la labor del hoy rector, que sin duda, goza de una imagen positiva y no politizada, forjada por su plausible gestión. Sin embargo, su excelente imagen ha generado el rechazo de algunos grupos políticos y personas que se apartan, sin razón aparente, del merecido distingo; entre ellos, el hoy Gobernador del Magdalena.
Desde hace un tiempo a Carlos Caicedo Omar le preocupa la administración del actual Rector, no porque exista un mal manejo o actos de corrupción evidentes o comprobables dentro de la Universidad por parte del doctor Vera, sino por la excelente labor que ha realizado. ¡Celos políticos, tal vez! porque algunos brillan con luz propia y destacan sin llegar a cegar, y otros buscan apagar la luz de los demás para lograr brillar. Lo cierto es que las óptimas gestiones de los recursos públicos, generan sinsabores en los bandos contrarios, quizás porque se anticipa un contendiente de mucha fuerza en futuras elecciones locales.
Es importante resaltar que el doctor Vera Salazar no ha mencionado públicamente que tenga aspiraciones políticas distintas a las concernientes con la Rectoría de la Universidad del Magdalena, pero su favorabilidad y su gestión como Rector lo pondría como uno de los candidatos a vencer en unas hipotéticas elecciones por la Alcaldía de Santa Marta.
Hoy Caicedo quiere recuperar la Universidad, y su candidato para eso, es el muy cuestionado Francisco García Rentería, nacido en Medellín, es Ingeniero Sanitario, Magister en Ingeniería Ambiental y con Doctorado en Ingeniería. Su paso por la Secretaria de Planeación de la Alcaldía Distrital de Santa Marta dejó mucho de qué hablar, especialmente por obras tales como la Megabiblioteca, los CDI de Bonda y Ciudad Equidad, puestos de salud, las 100 obras menores, entre otras. Además de esto, fueron muy criticadas las autorizaciones expedidas desde esa Secretaría para la construcción del Edifico Magenta en Playa Salguero, que afectaba a los indígenas Kogui con la demolición de uno de sus lugares sagrados ubicado dentro de la llamada línea negra. ¡Qué joya!
La política debería mantenerse alejada de la Universidad del Magdalena, pero es difícil apartar de la política cualquier aspecto de nuestras vidas y más difícil aún excluirla del rumbo de una entidad que maneja miles de millones de presupuesto púbico, y que sirve de vitrina amplia y reluciente, para lograr una exitosa contienda electoral a nivel local.
Ojalá hayan elecciones justas, que concluyan con la posesión del gestor que más sirva a los propósitos educativos y al crecimiento de la Universidad, pero sobretodo, que sea el estudiantado que escoja de manera libre y consciente lo que considere que es lo mejor para ella.
