Desde la Asociación Colombiana de Medicina Crítica y Cuidado Intensivo (AMCI) se han generado varias estrategias para apoyar al talento humano en salud en la atención de la pandemia por covid-19. Nelly Beltrán, médica intensivista, epidemióloga y representante de la AMCI contó al país estas iniciativas.
Inicialmente resaltó la labor que han desempeñado los profesionales de la salud en el país y la necesidad que se tenía de capacitarlos en los temas relacionados a cuidados intensivos. “Colombia cuenta con un talento humano en salud calificado y lo que hemos hecho es fortalecerlo a través de un curso virtual que está diseñado de una manera multidisciplinar en el área de cuidado crítico para la atención del paciente covid-19”, agregó.
“Desde que hicimos en abril la declaración de consenso de Medicina Crítica para la atención desde las diferentes disciplinas a los pacientes con sospecha o confirmación de diagnóstico con covid-19, estandarizamos el manejo de los mismos en todos los niveles de experticia de la medicina y creamos este curso virtual con el fin de fortalecer sus conocimientos”, explicó Beltrán.
Entre los profesionales de la salud que han accedido a esta capacitación, se encuentran médicos generales, intensivistas, anestesiólogos, ginecólogos, pediatras, residentes, enfermeras, auxiliares de enfermería, terapistas respiratorios, fisioterapeutas y estudiantes de alguna de las ramas de la salud, “incluso hemos llegado al talento humano en España y a diferentes países de Sudamérica”, comentó Beltrán.
Además, previendo desde el inicio de la pandemia la posible necesidad de fortalecer al talento humano en salud, la AMCI planteó el apoyo de los intensivistas por medio de la presencialidad y del teleapoyo. En este segundo propósito, se estableció la línea nacional gratuita para la prestación de asesoría permanente al personal en las UCI, la línea RASI – Red de Apoyo a Soporte Intensivo.
“Este servicio se ha usado desde los lugares más extremos de Colombia, pero queremos llegar a todas las instituciones prestadoras de salud de primer hasta el último nivel”, explicó la médica intensivista.
Manifestó la importancia de esta línea que igualmente tiene disponible la orientación en bioética, ya que esta emergencia sanitaria y debido a la saturación de las UCI, puede llevar a los médicos a tomar “decisiones difíciles” sobre pacientes con pronósticos de notoria gravedad.
Concluyó que esto ha sido el resultado de un trabajo articulado entre los diferentes actores del sistema de salud, “estamos agradecidos porque hemos trabajado en equipo con el Ministerio de Salud y Protección Social y la Asociación
Colombiana de Facultades de Medicina –ASCOFAME y por eso estamos prestos a continuar trabajando”, finalizó.
