A través del Instituto de Evaluación Tecnológica en Salud (IETS) Colombia puede tener la posibilidad de revisar toda la evidencia disponible que surge cada día en el país y en el mundo sobre el covid-19, para tener las mejores recomendaciones para los médicos y para que estos puedan tratar de la mejor manera a los pacientes.
Así lo explicó Adriana María Robayo García, directora del IETS, quien hoy participó en el programa de la Presidencia de la República, Prevención y Acción. “Desde el principio de la pandemia encontramos la forma de ayudar con cerca de 180 médicos, más de 60 sociedades científicas, hospitales, clínicas y diferentes tipos de agrupaciones que nunca habían trabajado juntas y que hoy de forma desinteresada revisan la masiva evidencia que surge cada día”, dijo.
A partir de esta labor, el IETS le presenta al Ministerio de Salud y Protección Social informes y recomendaciones para la toma de decisiones, como por ejemplo si un determinado medicamento se debe incorporar o no. En el caso de la ivermectina, el cual por pobre evidencia no fue contemplado como tratamiento para el covid-19.
“También estamos acompañando al Ministerio en las revisiones de lo que se está haciendo acerca de vacunas. Específicamente en el momento en el que haya una disponible, el IETS tendrá que evaluar el llamado del Gobierno Nacional sobre cuál es la mejor opción, cuál debería ser y la forma en que se introduzca el país”, indicó Robayo.
Frente a un posible tratamiento para el covid-19, la directora anunció que la buena noticia es que así como se están corriendo estudios de vacunas hay muchos de medicamentos que se tendrán que seguir analizando. “Son más de 33 en este momento, pero de los que se han anunciado a la fecha no se recomienda su uso porque pueden tener más perjuicios que beneficios para la gente que lo tome”, sostuvo.
Entre esos citó la cloroquina e hidroxicloroquina, para los que advirtió que estos son medicamentos para enfermedades reumatológicas y que de usarlos para otros fines, podría generar desabastecimiento además de efectos adversos en la salud.
Respecto al redmizivir, Robayo dijo que es una de las posibilidades que hay en este momento. “Sin embargo, faltan muchos estudios. Es una avalancha de información que tanto los clínicos como los metodólogos están analizando todo el tiempo en muy corto tiempo y que toca mirar con mucho cuidado”, concluyó.
