Para Nubia Esperanza Bautista Bautista, subdirectora de Enfermedades no Transmisibles del Ministerio de Salud y Protección Social, los cambios en la rutina de trabajo, en la permanencia en casa, el compartir más tiempo con los hijos o el resto de la familia, pueden generar tensión y afectar la salud física y metal.
“La tensión que se genera por estos cambios laborales y la situación que estamos pasando, hacen que tengamos momentos de ansiedad, depresión, miedo, incertidumbre y de tensión que afectan la salud; por eso, mantener pausas activas y hacer ejercicios de respiración y distensión muscular, van a contribuir a que sintamos un poco de tranquilidad y así mantener también una buena salud mental”, señala Bautista.
Agrega que esos minutos de pausas diarias, “son importantes para conservar la armonía en la convivencia y con los demás integrantes de la familia además para dialogar y estrechar vínculos con los demás.”
Reitera en las recomendaciones a seguir para hacer frente a las diversas emociones que se llegan a sentir, entre ellas están: mantener empatía con las demás personas, atender las indicaciones de aislamiento social por el bien de todos, no entrar en pánico, mantener una rutina de comidas, de ser posible hacer actividad física en casa, mantener una buena comunicación con amigos y familiares, comentar las emociones y pensamientos, así como hacer ejercicios de respiración y relajación.
“Tomarse unos minutos para pensar, para aceptar las emociones, para cerrar los ojos, concentrarse en la respiración, sentir que invade todo nuestro cuerpo y repetirlo las veces que se necesario ayudarán a mantener nuestra salud”, concluye la subdirectora.
