Por Víctor Rodríguez Fajardo
Recordando el decreto presidencial del entonces presidente Alfonso López Michelsen, que permitía la entrada de divisas extranjeras por el Banco de la República, en su momento fue llamado “ventanilla siniestra”, con esa medida se legalizaron grandes sumas de dinero producto de actividades ilícitas. Lo que entró en ese periodo, pasó de lo ilegal a lo legal sin existir investigación alguna ni judicialización; tal vez tenga razón el senador “Justo&Bueno” Antonio Sanguino, al calificarnos como una “republiqueta tropical”por ser permisivos en muchas actos al margen de la ley que se convierten por vía exprés a la legalidad, tal como han sido los procesos de paz con impunidad incluida y que le permiten a desmovilizados tener título de “honorables”.
Acaba de ser convocada a sesiones extraordinarias la asamblea departamental del magdalena para que en tiempo record sea debatido, aprobado, sancionado y se convierta en ordenanza, un proyecto parecido en su esencia al que fue decreto presidencial en la década del 70´bajo el gobierno López Michelsen, un proyecto siniestro… veamos por qué:
Cuando han pasado casi 120 días de este gobierno departamental, por primera vez presentan un proyecto de ordenanza que tiene que ver con el presupuesto del departamento del Magdalena a la corporación Asamblea Departamental. Este, pretende ocultar la negligencia administrativa bajo la excusa de la emergencia sanitaria por motivo del Covid_19. Extraño que los diputados no agendaron esta anomalía, citando al equipo de hacienda para explicar tan singular situación. Adición igual a la Contraloría Departamental, toda vez que el nuevo contralor no se ha percatado de la ejecución del año la cual ya superó la tercera parte de la vigencia sin facultades. ¿Se les pasó o estaban negociando?
¿Un proyecto de modificación que encubre legalizar hechos cumplidos en la adición presupuestal del cierre sin facultades? ¿Cuál fue la demora y ahora cual es la prisa?
Los convocan a extras del 27 de abril hasta el 1 de mayo, para aprobar un proyecto de ordenanza que contiene reporte de cierre de la vigencia fiscal 2019 (superávit total), reporte de modificaciones realizadas al amparo de la emergencia sanitaria (apenas mencionadas), ajustes a las asignaciones de salud y educación conforme a las cifras definitivas anunciadas por el gobierno central, modificaciones a lo interno del presupuesto de gastos en créditos y contra créditos que incluyen elevar en 5 mil millones a la contratación de supernumerarios, y disminuir en 10 mil millones a la apropiación para pagar pensionados, todo esto en tan solo 5 días. ¿Es en serio? 5 días para designar ponentes, debate en comisión y plenaria, citar a funcionarios, siendo importante y amplio el tema, ¿no se le da el tiempo para un debate sano?
Sigamos revisando lo exótico del contenido del proyecto que le llega a la Asamblea:
En uno de sus apartes, el proyecto habla de recursos atrapados en la fiduciaria identificados como partidas por identificar por un valor superior a los 3.6 mil millones de pesos. ¿Pretende el gobernador que la Asamblea llegue de gancho ciego y apruebe este ítem el cual no ha sido descifrado por el equipo de hacienda en 4 meses de gobierno? No pretenderá ahora, trasladar esa responsabilidad a la fiduciaria, pues es de su especial interés asignar o, comisionar a funcionarios competentes para realizar esa identificación diligentemente. Es muy posible que en estos recursos, pertenezcan a la Universidad del Magdalena y/o al Hospital universitario Julio Méndez Barreneche por concepto de estampillas. ¿Será que esas dos instituciones no necesitan ahora más que nunca esos recursos?
¿Será que pretenden que la Asamblea pase por alto una reducción en las asignaciones del SGP de salud y educación por el orden de 45.8 mil millones de pesos sin el respectivo debate?
Tenemos conocimiento que el equipo base de la secretaria de hacienda tiene la idoneidad, capacidad y entrenamiento para hacer su trabajo, la prueba es que el decreto 044 del 20 de enero del 2020 determinó el cierre fiscal de la vigencia 2019, eso demuestra que hicieron su tarea a tiempo como cualquier ente territorial en Colombia que sea eficiente. La parte política, que va en las decisiones del gobernador con sus secretarios de despacho y asesores, son los que han afectado al pueblo del Magdalena por el forcejeo descarado y permanente con la corporación Asamblea departamental. Desde el 20 de enero hasta el 27 de abril han pasado impunemente y en detrimento de los magdalenenses 90 días para presentar este proyecto. Señores, de los 12 meses del año, ya pasaron 4 meses equivalentes al 33% de la vigencia fiscal. Aquí debe intervenir la CNR y la PGN; aquí no cabe la excusa de la pandemia, aquí es un gobierno enfrentado a las normas, leyes y costumbres democráticas, que no respeta la institucionalidad sino que vive descalificando a quienes osan pensar diferentes como es el caso de la corporación dónde se deben debatir temas como el de las facultades al gobernador.
Los traumas son varios, enuncio dos:
Recursos que debieron incorporarse a finales de enero para estar disponibles de ejecución, se retrasan hasta el mes de mayo, importante saber cómo logró la gobernación funcionar, contratar y ejecutar el presupuesto 2020 hasta la fecha sin las debidas facultades o consultas. ¿Sera que nos van a salir con un concepto milagroso? Ese concepto tiene como función evadir las responsabilidades competentes a la asamblea.
El otro trauma es la distorsión que produce en la información financiera del departamento cuando los reportes que se presentan al nivel central no contienen todos los datos que deberían. La adición del cierre a la vigencia fiscal del 2020 debe presentarse en el reporte Enero-Marzo a la CGR y al FUT. La Contraloría y Minhacienda toman decisiones de impacto para el departamento, en esta oportunidad lo debieron hacer sobre una distorsión por la no actualización oportuna de la información. Estos datos solo podrán ser conocidos de forma oficial en el reporte Abril-Junio. ¿Cómo puede quejarse la administración de no recibir la atención con recursos al nivel de las circunstancias, si la directriz que impero en el ordenador fue netamente politiquera? Aquí es donde el show y las cámaras de youtuber no funcionan, acá los asesores de imagen naufragan y los financieros pierden el año en detrimento del Magdalena.
Como cuña a la negación de logros de la pasada administración, este proyecto, sin hacer show mediático reporta que encuentra un superávit total de 181.6 mil millones que le permiten enviar recursos a los proyectos de inversión en todo el departamento. Ahí tiene recursos para que usted raspe la olla gobernador.
Buenas noticias para aquellos que reclaman deudas al sector de la educación, se incorporan nuevos recursos por el orden de los 28.4 mil millones de pesos. Se frotan las manos los intermediarios.
En resumen, se gobernó sin facultades 4 meses, de igual forma contrató arbitrariamente amparado en un concepto para evadir la consulta que por ley le compete a la Asamblea. En la exposición de motivos describe los actos administrativos realizados sin facultades dejando en el aire un tufillo de legalizar de agache hechos cumplidos, y convoca a unas extras en un tiempo insuficiente para cubrir los términos debidos para un debate a tan importante tema. Gobernador, dejemos la hipocresía, bajémosle al show mediático y al discurso veintejuliero, que traumatiza al Magdalena. Hoy usted envía un proyecto que genera muchas suspicacias a los profanos en la materia y que debe ser motivo de atención de los entes de control. ¿Qué espera de la Asamblea en estas circunstancias? ¿Otra excusa para ocultar la incompetencia o un trabajo de equipo responsable cada uno por lo que le compete? Después no pretenda victimizarse para encubrir la mediocre capacidad de pasar de la oratoria a la ejecución, usted es un encantador de masas que se estrella cuando no sabe conectar las obras de gobierno y el trabajo en equipo interinstitucional.
La forma como está redactado este proyecto nos conecta con la ventanilla siniestra del siglo pasado, en esta oportunidad ¿Qué se esta legalizando?
