- El dispositivo utilizado es una microcomputadora para niños que funciona al conectarse a un televisor.
El delincuente estuvo conectado a los servidores del sistema del Jet Propulsion Laboratory (JPL) en California por un tiempo de 10 meses antes de que se percataran de su existencia. En el operador, había información confidencial sobre insumos científicos recogidos en Marte y contenidos sobre ley de control de exportaciones para tecnologías.
Ante la situación, la NASA se vio obligada a desconectarse de los controles del centro para evitar que el ‘hacker’ tuviera acceso a otras sedes de la institución, como el Centro Espacial Johnson en Houston, lugar donde se maneja la Estación Espacial Internacional y los vuelos estadounidenses.
Según el inspector general de la NASA, los datos extraídos ilegalmente ascienden a 500 megabytes. Asimismo, confirma que algunos de estos documentos estaban relacionados con la misión de la Regulación Internacional del Tráfico de Armas y el Laboratorio Científico de Marte.